Hipoglucemia: Una complicación frecuente ¿se puede prevenir?

Cuando la concentración de glucosa en sangre es muy baja, el cuerpo lo sufre y da señales. Hablamos de Hipglucemia (HPG) cuando el valor registrado es inferior a 70 mg/dl. Claro que en personas sin diabetes, esto es rarísimo, ya que el organismo cuenta con un sistema automatico que regula los niveles glucemicos sin fallas.  Pero en presencia de diabetes las cosas cambian. Para empezar la célula que lee la cantidad de glucosa que circula, y que a su vez produce y libera la insulina (célula Beta) está enferma. Y es necesario utilizar fármacos (orales y/o aplicar insulina) para disponer de una cantidad suficiente de esta hormona, que se ocupará de hacer que la glucosa ingrese a las células que la requieren.

Ahora, en determinadas circunstancias la acción del tratamiento supera lo que se está necesitando en un momento y ocurre una HPG.

1- ¿Cuáles son los síntomas? Son variados, pueden aparecer uno o varios de los siguientes:

    1. Sudoración excesiva, con la piel fría
    2. Debilidad generalizada y/o temblores
    3. Mareos, dolor de cabeza
    4. Hambre excesiva
    5. Cambio de caracter, irritablidad, confusión

2- ¿Cuáles son la causas?

    1. Excesiva dosis de insulina o del fármaco oral
    2. Posponer o saltear una comida (los medicamentos no pueden adaptarse a nuestras decisiones)
    3. Realizar un actividad física o ejercicio, no habitual
    4. Consumir alcohol

3-¿Cómo actuar?

    1. Primero: siempre actuar, no esperes tener confirmación. Ante la sospecha de HPG hay que ingerir un líquido azucarado: una gaseosa regular, jugo de naranja (si, tiene mucho azúcar) o una infusión con azúcar.
    2. Si confirmaste que es una HPG, luego de la bebida, consumí galletitas, pan o cereales tipo desayuno, para que continuen aportando glucosa, mientras se diluye el efecto medicamentoso.
    3. Solo en el caso de perdida de la conciencia, al no poder tragar, se indica aplicar Glucagon (la hormona que libera glucosa desde los tejidos hacia la sangre y eleva la glucemia por unos minutos). Deberás consultar a tu médico sobre esto.

4- Analizá la posible causa de la HPG, para que entre vos y tu médico intenten que no se repita.

¿Qué tan importante es el Estilo de Vida en el Tratamiento de la diabetes?

Una mala noticia es que la diabetes está en niveles críticos. No es sólo una crisis sanitaria, también es un problema social. Hay en el mundo hoy 366 millones de personas con diabetes y otros 280 millones bajo riesgo de desarrollarla. De no contar con acciones efectivas para su freno, en 2030 se calcula que alcanzará a 552 millones las personas con diabetes, además de otros 398 millones en alto riesgo. Ningún país, poderoso o subdesarrollado, quedará al margen. El desafío actual es reducir la enfermedad y al mismo tiempo también desactivar los altísimos costos de su tratamiento. Las organizaciones sanitarias proponen un diagnóstico precoz, un tratamiento costo – eficaz y la prevención, en la medida de lo posible.

Y una buena noticia es que, como veremos, con pequeños logros se logran grandes recompensas. Como un buen ejemplo, bajar algo de peso.

La diabetes es una enfermedad crónica y por lo tanto no tiene curación, en cambio si es posible brindarle un buen tratamiento. Con diferencia a otros padecimientos crónicos, una persona con diabetes puede hacer mucho por mejorar su enfermedad. A través de … su estilo de vida.

Si nos fijamos en los hallazgos del estudio «The Finnish Diabetes Prevention Program» (DPP, por sus siglas en inglés). Donde se comprobó que las personas con alto riesgo pueden prevenir o retrasar la diabetes tipo 2 si modifican su Estilo De Vida. Básicamente si:

1. Pierden»unpoco»depeso.

2. Hacen 30 minutos de actividad física de intensidad moderada, como caminar cinco días a la semana.

En la figura 1 se muestran personas que compartían el riesgo de desarrollar diabetes. Fueron divididas en 3 grupos: «Metformina», que recibió medicación; «Placebo», que recibió un comprimido que no tenía medicación (sin saberlo el paciente) y el «Lifestyle» que recibió instrucciones para modificar sus hábitos y hacer su estilo de vida según las normas previstas para personas con diabetes. El seguimiento fue durante 4 años

 

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Durante estos años resultó que el grupo que modificó su estilo de vida («Lifestyle»), fue el que menos desarrolló diabetes, incluso comparado con el medicado con Metformina. Y lo más significativo fue que el mayor beneficio es atribuido a la moderada pérdida de peso.

De manera que con acciones comprobadamente útiles. La diabetes se puede prevenir o retrasar. En todo caso mejorar su control, si ya hubo diagnóstico.

De la teoría a la Práctica

La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera al estilo de vida como: la manera general de vivir, que se basa en la interacción entre las condiciones de vida y la conducta, que a su vez están determinados por factores socioculturales y por las características personales de los individuos.

Los estilos de vida se van determinando alrededor de las alternativas posibles con que se cuenta, a su capacidad para decidir y a las circunstancias socioeconómicas que le tocaron. Están referidos a conductas y preferencias relacionadas con el tipo de alimentación, actividad física, consumo de alcohol, tabaco u otras drogas, responsabilidad para con la propia salud, actividades recreativas, relaciones interpersonales, prácticas sexuales, actividades laborales y patrones de consumo.

Podemos afirmar que la mayoría de las personas que padecen diabetes tienden a ser desordenados, principalmente en cuanto a su alimentación, actividad física, en la toma de medicamentos y en las sistematización de las consultas médicas. Sumemos que frecuentemente presenta condiciones alteradas en el estado emocional, la situación en general empeora.

Hábitos saludables

¿Por que comemos lo que comemos?.

Un hábito es un patrón de conducta, un modo de hacer algo, que se repite de manera más o menos sistemática cada vez que se presenta una circunstancia similar. Se trata de respuestas, aprendidas en algún momento y automatizadas luego, para que su aparición no sea un acto de plena conciencia, sino simplemente una respuesta ante un estimulo, sea este visual, auditivo, etc.

Los hábitos alimentarios en los humanos son sumamente complejos y se van determinando a lo largo de la vida. Esas acciones automáticas son muy difíciles de controlar, por ejemplo: si un hombre al salir a comer a un restaurant se sienta y come absolutamente todos elementos disponibles de la panera que le acercan, puede que quiera corregir este «habito», porque luego se arrepiente, y a pesar de ello repetirá la acción la próxima vez que se concurra al mismo sitio o uno similar. Para evitarlo debería desarrollar una estrategia consciente que le permita enfrentarse a esta situación de una manera diferente.

Los hábitos alimentarios no aparecen de un día para otro, como el comportamiento humano en general, son el resultado de influencias sociales (sistema de valores, factores económicos), culturales (elección de alimentos según la ocasión: pastas los domingos, pizza los viernes, sandwiches y torta de cumpleaños) y psicológicas (las respuestas emocionales frente al alimento, experiencias infantiles, etc. ). Los alimentos suelen tener un significado simbólico. La leche simboliza seguridad, y bienestar; la carne y el pan, son más

«masculinos», mientras que las hortalizas y las frutas parecen más «femeninos». Los alimentos suelen ser vinculados a las edades (la leche es para los niños o el asado para los adultos) y vinculados a «premio» (un dulce) o un «castigo» (sopa).

Los alimentos se eligen porque que bridan al acto de comer un significado que excede a la necesidad biológica de incorporar nutriente para sostener la vida.

Cambiar conductas es más complejo de lo que se imagina.

Nilda me cuenta: «cuando me diagnosticaron diabetes tipo 2, me indicaron que debía perder peso, controlar mi glucemia, hacer actividad física y tomar unos medicamentos costosos ¡Todo a la vez!. Me sentí abrumada. Para mí, era difícil tan sólo pensar en la palabra “diabetes”. Y además ahora todos me retan. Porque estoy gorda, porque como una tostada, porque hoy no hice ejercicio. Basta!!!».

Ella sabe lo qué es una vida saludable, sin embargo como la mayoría, no es capaz de realizar cambios o sostenerlos en el largo plazo.

Le decimos a Nilda: calma, haga un cambio por vez y propóngase un plan. Por ejemplo, si no tiene tiempo o no camina porque se aburre, fraccione su caminata. Es más fácil disponer 10 minutos tres veces al día para hacer pequeños trayectos y lograr el objetivo.

Establezca horarios para comer, respetando las 4 comidas básicas. Si le indicaron un plan de alimentos, verá que puede comer muchas cosas, algunas muy ricas si las preparamos bien. Una carne vacuna en el plato no tiene que ser un churrasco a la plancha. Puede ser presentada en una brochette con cebollas y ajíes. Puede ser hecho al wok con berenjenas zucchinis cebolla de verdeo… y más

Es muy importante trabajar en la compra de los alimentos, como prestar atención en el momento de comer. y verlo como un hecho positivo. La conducta o comportamiento alimentario es todo aquello que realiza una persona para alimentarse: comprar el alimento, prepararlo, seleccionar el tamaño de la porción de la comida a consumir. Asimismo, el entorno (donde y con quién se come) influye en la selección y cantidad de alimentos consumidos.

Puede organizar comidas en reuniones donde se presente lo que los otros esperan encontrar y además otras opciones, como distintas hortalizas para armar ensaladas. Pollo frio trozado. Un matambre casero en rodajas.. y más.

Cuando estamos atentos a lo que comemos podemos registrar mejor la saciedad, es decir, podemos detener la ingesta en respuesta a señales que se hacen evidentes cuando nos permitimos captarlas. Debemos lograr que lo que comamos sea la porción servida y dejar lo que sobra para otra oportunidad. Es un cambio de actitud importantísimo, ya que crecimos estimulados a no dejar comida porque «hay quien no tiene para comer…» o «la comida no se tira». ¿Porque no guardar lo que sobra? y un día a la semana se abren los recipientes y hace un «tapeo». ¡Es muy creativo!.

Quién mejor se alimenta puede tener mejor salud, y si por tener diabetes cambió (para bien) su manera de alimentarse, está más que claro que su salud mejorará más allá de la diabetes.

Al comer a conciencia e incorporar el movimiento como una parte esencial de la vida, los consejos del médico que vienen con el diagnóstico de la diabetes se hacen más fáciles de cumplir. Luego irán quedando en la lista: no fumar, consultar al médico según él se lo solicite, realizar los exámenes de hemoglobina glicosilada (A1c), colesterol, presión arterial, etc.

Y créame que la diabetes no debería ya ser un fantasma en su vida, sino una realidad con la que se aprende a convivir y que de algún modo «obligará» a tomar mejores decisiones respecto a su estilo de vida, ¿resultado? un gran bien a su salud física y espiritual. Cuando abandone el enojo y mire con optimismo el futuro.

Dr. Alejandro Ugarte
Jefe de la Sección Nutrición y Diabetes del CEMIC. Prof. Asociado de Medicina. IUC

¿Cómo Detectar la Prediabetes?

La diabetes en un adulto, por lo general no aparece súbitamente sin que el organismo se lo notifique antes. Durante un tiempo, que puede prolongarse por casi diez años, puede no cumplir con los criterios para que le diagnostiquen la diabetes, pero su condición tampoco es completamente normal. Durante este período, se tiene lo que se conoce como prediabetes.

Una persona con prediabetes usualmente no desarrolla enfermedades en los ojos, los riñones o el sistema nervioso (complicaciones potenciales de la diabetes). Sin embargo, el riesgo de esta persona de padecer de enfermedades cardiovasculares y accidentes cerebrovasculares, es mucho mayor que el que corre una persona con niveles normales de glucosa. La prediabetes tiene mucho en común con el llamado síndrome de resistencia a la insulina, conocido también como síndrome metabólico.

Entre 1 y 2 millones de personas en la Argentina tienen prediabetes. Los exámenes para diagnosticar la prediabetes son recomendables para cualquier persona mayor de 45 años. Las personas menores de 45 años sólo deben hacerse estos exámenes si están con sobrepeso o si presentan uno o más de los siguientes factores de riesgo:

 Presión arterial alta
 Nivel bajo de colesterol HDL o colesterol “bueno”
 Triglicéridos altos
 Antecedentes de diabetes en la familia
 Mujer que tuvo diabetes gestacional o un bebe nació con más de 4 kilos

El diagnóstico de la prediabetes implica determinar su nivel de glucosa en la sangre -la cantidad de azúcar presente en la sangre-. Existe prediabetes si el nivel de glucosa en la sangre es superior al normal, aunque no tan alto como para ajustarse a la definición estándar de la diabetes mellitus. En la siguiente Tabla se muestran los niveles de glucosa que indican presencia de prediabetes.

Diagnóstico de la Prediabetes

Diagnosticar la prediabetes es crucial si se tiene en cuenta que ciertos cambios en el estilo de vida, especialmente la dieta y los ejercicios, han demostrado prevenir que personas con prediabetes lleguen a desarrollar la enfermedad.
En el caso de las personas que no responden a los cambios en el estilo de vida, se puede lograr un resultado similar a través del uso de medicamentos (metformina).

Sección Nutrición y Diabetes, CEMIC

Estado

Glucosa en Ayunas

Glucosa 2 Hrs después de comer

Normal

Inferior a 110 mg/dl

Inferior a 140 mg/dl

Prediabetes

110–126 mg/dl

140–199 mg/dl

Qué Hace la Diabetes

Cuando la prediabetes se convierte en diabetes, el nivel de glucosa en el organismo es aún más alto. Analicemos el papel de la glucosa en su organismo, las pruebas para diagnosticar la diabetes y los síntomas que puede sentir una persona si tiene diabetes.

El papel de la glucosa

En la naturaleza hay muchos tipos diferentes de azúcares, pero la glucosa es el azúcar que tiene el papel estelar en el organismo, pues es una fuente de energía instantánea para que los músculos se puedan mover y puedan tener lugar importantes reacciones químicas. El azúcar es un carbohidrato, uno de los tres nutrientes potenciales fuentes de energía en el organismo. Los otros son las proteínas y las grasas.

El azúcar común o sucrosa, está compuesta por dos tipos de azúcares unidos: glucosa y fructosa. La fructosa es el tipo de azúcar que existe en las frutas y los vegetales. Es más dulce que la glucosa, lo que significa que la sucrosa también es más dulce que la glucosa. La sed y la necesidad frecuente de orinar son los síntomas más conocidos de la diabetes, pero la diabetes mellitus no es la única enfermedad asociada con estos síntomas. Otra enfermedad en la que los líquidos se ingieren y se eliminan en cantidad se llama diabetes insípida. En este caso, la orina no es dulce. La diabetes insípida es una enfermedad completamente diferente, que no debe confundirse con la diabetes mellitus. La diabetes insípida ocurre cuando una hormona del cerebro conocida como hormona antidiurética está ausente en el organismo. Esta hormona normalmente ayuda a los riñones a impedir que el organismo pierda grandes cantidades de agua. El nombre diabetes es lo único que esta enfermedad tiene en común con la diabetes mellitus.

Como diagnosticar la diabetes

La definición clásica de la diabetes mellitus es glucosa excesiva en una muestra de sangre. El nivel estándar para considerar la glucosa normal se redefinió en 1997 porque muchas personas estaban experimentando complicaciones de diabetes incluso cuando no tenían diabetes de acuerdo con los estándares de entonces. Después de muchos debates, y las usuales deliberaciones propias a una decisión trascendental, la Asociación Americana de Diabetes (ADA) publicó el nuevo estándar para el diagnóstico, que parte de cualquiera de los tres criterios siguientes:

– Glucosa plasmática al azar superior o igual a 200 mg/dl, acompañada de síntomas de diabetes. Glucosa plasmática casual es el nivel de glucosa cuando el paciente ha comido normalmente antes del análisis.
– Glucosa plasmática en ayunas (GPA) superior o igual a 126 mg/dl. Ayunas significa que el paciente no ha consumido alimentos durante las ocho horas previas al análisis.

– Glucosa en la sangre superior o igual a 200 mg/dl, cuando el análisis se realiza dos horas (2-h post carga de glucosa) después de ingerir 75 gramos de glucosa por vía oral. Este análisis se conoce desde hace tiempo como la Prueba Oral de Tolerancia a la

Glucosa. A pesar de que toma tiempo y es engorrosa, sigue siendo el mejor método para el diagnóstico de la diabetes en personas asintomáticas.
– En 2011 se agregó oficialmente la prueba de Hemoglobina Glicosilada (A1c), que muestra retrospectivamente el nivel promedio de azúcar (glucosa) en sangre en las últimas seis a ocho semanas. La ADA incluyó los resultados de la A1c como otra forma para diagnosticar diabetes. Una A1c igual o mayor a 6.5% es ahora diabetes, mientras que una entre 5.7% y 6.4% es considerada prediabetes.

Dicho de otra forma:

  •   Una GPA inferior a 110 mg/dl indica un nivel normal de glucosa en ayunas.
  •   Una GPA superior o igual a 110 mg/dl, pero inferior a 126 mg/dl indica glucosaanormal en ayunas (lo cual indica prediabetes).
  •   Una GPA igual o superior a 126 mg/dl indica un diagnóstico provisional dediabetes, (debe repetirse).
  •   Un análisis de glucosa en la sangre dos horas después de ingerir glucosa por víaoral (2-h post carga de glucosa) cuyo resultado sea inferior a 140 mg/dl indicatolerancia normal a la glucosa.
  •   Un análisis de glucosa en la sangre dos horas después de ingerir glucosa por víaoral (2-h post carga de glucosa) cuyo resultado sea superior o igual a 140 mg/dl,pero inferior a 200 mg/dl indica intolerancia a la glucosa.
  •   Un análisis de glucosa en la sangre dos horas después de ingerir glucosa por víaoral (2-h post carga de glucosa) cuyo resultado sea igual o superior a 200 mg/dlofrece un diagnóstico provisional de diabetes.
  •   Una A1c igual o mayor a 6.5% es diabetes, mientras que una entre 5.7% y 6.4%es una prediabetesAtención: El resultado de un solo análisis no es suficiente para confirmar que el paciente tiene diabetes. Para llegar a un diagnóstico, cualquier análisis debe volver a dar positivo. Ningún paciente tendrá un diagnóstico de diabetes basado en una sola prueba, puede que en un segundo análisis se demuestre que el diagnóstico inicial había sido incorrecto.Como se regula la glucosa

    Para entender los síntomas de la diabetes, usted necesita saber un poco sobre la forma en que el organismo normalmente maneja la glucosa y qué pasa cuando las cosas fallan. La insulina es la hormona que controla con precisión los niveles de glucosa en la sangre. Una hormona es una sustancia química producida en una parte del cuerpo, que viaja (usualmente a través la sangre) hasta otra parte distante donde realiza su función. En el caso de la insulina, esa función es actuar como una llave que abre el interior de una célula (muscular, adiposa u otra célula) para que la glucosa pueda ingresar. Si la glucosa no puede entrar en la célula, no puede aportarle energía.

    La insulina es esencial para el crecimiento. Además de posibilitar la llegada de la glucosa a las células, se le considera como la hormona constructora, porque permite que la grasa y el músculo se formen, y promueve el almacenamiento de glucosa en forma de glucógeno, para usarla cuando no está llegando “combustible”. La insulina también bloquea la descomposición de las proteínas. Como ve, sin insulina no se sobrevive durante mucho tiempo.

A pesar de este delicado balance, en condiciones normales el organismo se las arregla para mantener el nivel de glucosa bastante estable, aproximadamente entre 60 y 100 mg/dl, en todo momento.

La glucosa fuera de control

La glucosa comienza a elevarse en la sangre cuando no se tiene suficiente insulina o cuando la insulina no está funcionando de forma efectiva. Así una vez que la glucosa supera los 180 mg/dl, comienza a filtrarse en la orina y la hace dulce. Hasta ese punto el riñón, era capaz de extraer la glucosa antes de que entre a la orina. La eliminación de la glucosa en la orina es lo que conduce a muchas de las complicaciones agudas de la diabetes. La siguiente lista contiene los síntomas más comunes de la diabetes en su etapa inicial, y cómo ocurren. Uno o más de los siguientes síntomas pueden estar presentes cuando se diagnostica la diabetes:

– Necesidad de orinar frecuentemente y sed intensa: La glucosa en la orina obliga extraer más agua de la sangre, por lo que se forma más orina. Como hay más orina en la vejiga, se siente la necesidad de orinar más frecuentemente durante el día y también en la noche. A medida que disminuye la cantidad de agua en la sangre, siente sed y se toman líquidos con mucha más frecuencia.

– Fatiga o Astenia: si la insulina no está funcionando, la glucosa no puede entrar a las células (como músculos o células adiposas) que requieren de la insulina para que las cosas funcionen. (La excepción más importante aquí es el cerebro, que no necesita insulina). Como resultado, la glucosa no se puede utilizar como combustible para mover músculos o facilitar muchas otras reacciones químicas que tienen que ocurrir para que se produzca energía.

Los diabéticos a menudo se quejan de cansancio, pero se sienten mucho más fuertes después de que, gracias al tratamiento médico, la glucosa vuelve a entrar en las células.
– Pérdida de peso: La pérdida de peso ocurre en algunas personas con diabetes porque no tienen insulina, que es la hormona constructora. Cuando la insulina no está presente por alguna razón, el organismo comienza a debilitarse. Pierde tejido muscular. Parte de los músculos (sus unidades estructurales o aminoacidos) se convertirán en glucosa, para ser fuente de la energía faltante, pero como ésta no puede entrar a las células. La glucosa se elimina del organismo a través de la orina. El tejido adiposo a su vez se descompone en pequeñas partículas de grasa que pueden proporcionar una fuente alternativa de energía. Mientras el organismo se resquebraja y elimina la glucosa en la orina, se evidencia un adelgazamiento patológico. No es la pérdida de peso voluntaria que ayuda en el tratamiento de la diabetes.

– Infecciones genitales: Cuando aumenta la glucosa en la sangre, todos los líquidos corporales contienen niveles más elevados de glucosa, entre ellos el sudor y las secreciones como el semen del hombre y las secreciones vaginales de las mujeres. Muchos microorganismos como las bacterias y los hongos proliferan en ambientes con alta concentración de glucosa. Las mujeres comienzan a quejarse de escozor o irritación, secreciones vaginales anormales y, algunas veces, olor desagradable. En el hombre se irrita el prepucio, así como alrededor del glande se acumulan hongos (habitualmente del genero cándida albicans).

14 de Noviembre
Día Mundial de la Diabetes

Se conmemora en homenaje a Frederik Banting, quien nació el 14 de noviembre de 1891. Este médico canadiense, junto con norteamericano Charles Best, logró aislar por primera vez la insulina en 1921. Gracias a este hallazgo la diabetes pasó de ser una enfermedad mortal a ser una enfermedad controlable.

El «Día Mundial de la Diabetes» está copatrocinado por la Federación Internacional de la Diabetes (IDF) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) y tiene como objetivo que las personas con diabetes, el personal sanitario, las instituciones y la sociedad en general tomen conciencia, por un lado, del alcance, las características y las posibles consecuencias de esta enfermedad y, por otra parte, de los beneficios y repercusiones positivas de un tratamiento adecuado y del control y un estilo de vida sano.

La Sección Nutrición y Diabetes del CEMIC se asocia a este acontecimiento presentando un nuevo artículo de difusión sobre la importancia de saber sobre diabetes. La mejor manera de anticiparse y/o ser más eficaz en el control de esta enfermedad.

Cordialmente

Dr. Alejandro Ugarte

Médico Nutricionista Universitario (UBA)
Prof. Asociado de Medicina (IUC, Instituto Universitario CEMIC)) Jefe de la Sección Nutrición y Diabetes del CEMIC.

La Alimentación en el tratamiento de la Diabetes

Si su pregunta es ¿cuál es la dieta que tiene que hacer teniendo diabetes? Le simplificaría la respuesta al decirle que debe ser una dieta «normal». Pero no es tan simple, ya que desafortunadamente los conceptos que se basan en enunciados terminan no siendo aplicables a todas las personas por igual.

En primer lugar habrá que definir que es normal. Si lo que cada uno hace cada día es «lo normal» corremos alto riesgo de equivocarnos. La indicación de un plan de alimentos por parte de un profesional tiene en cuenta múltiples aspectos, más allá de si tiene o no diabetes. Por ejemplo: si está con sobrepeso, o presenta hipertensión arterial. Si presenta constipación, colon irritable, o no consume los alimentos indicados por intolerancia o falta de hábito, como las hortalizas. Llegar a la «normalidad» para cada uno requiere de adaptación, cuando lo que se le recomienda no es lo que usted hace cotidianamente.

Aunque en esencia las indicaciones dietéticas apuntan al consumo de todos los nutrientes (proteínas, hidratos de carbono y grasas) necesarios para el mantenimiento de un buen estado de salud. Suele circular un pensamiento popular que asocia a la diabetes con una dieta en la cual se restringe severamente a los hidratos de carbono («no comas las P: papas, pastas, pan ni postres»). Esto no es cierto, se deben comer todos los nutrientes.

Entonces le diré que una persona que padece diabetes puede (debe) comer hidratos de carbono. La singularidad de esta afirmación radica en la cantidad a ingerir. Que debe ser, la necesaria, ni más ni menos. Establecer el límite del consumo es vital para que se cumpla el cometido, comer lo que todos, pero en una porción diferente: la que se le indicó.

Así no pasará hambre y podrá comer la misma comida que quienes lo rodean, mientras defina correctamente la porción que va a consumir y, por supuesto, no la repita al terminarla.

Otro punto a tener en cuenta es el fraccionamiento de la comida diaria. Es estratégico no pasar muchas horas sin ingerir alimentos. La base de esta recomendación es hacer desayuno (en inglés breakfast -«romper» el ayuno-), almuerzo, merienda (habitualmente subvalorada) y cena. Con la posibilidad de agregar colaciones (o «extras») en el tiempo que trascurre entre las comidas o cuando por una determinada circunstancia la hora de comer se posponga. Agreguemos la posibilidad del deseo de comer algo en cualquier momento del día. En estos casos lo oportuno contar con una fruta pequeña o un yogur, o una sopa de vegetales para estas ingestas intermedias. No conviene elegir productos que contengan harinas, ni quesos, ya que estos estimulan a la repetición de la porción.

Comer fuera de casa

O en situaciones sociales, es otro momento crítico, ya que son ideales para cometer errores en la alimentación de una persona que tiene diabetes (¡ y para el resto de los concurrentes también !).

Es normal que frente a la presencia de comida intentemos comer, no siempre por tener hambre en ese mismo momento. Hay una tendencia natural, automática, de no desaprovechar la posibilidad de consumir un producto que es biológicamente necesario para aportar energía, indispensable para mantener la vida: un mandato ancestral. Concepto que será cuestionado si quién esta estirando su mano para tomar alimentos es una persona con sobrepeso, que además no salteará ninguna comida ese día. La tentación por comer es muy fuerte y tiene puntos de análisis sumamente complejos. Como ejemplo veamos: el placer que produce comer, la vinculación emocional respecto de determinados alimentos, lo simbólico de la comida, los recuerdos infantiles, y una lista de etcéteras. No es fácil negarse a comer.

La diabetes «acompaña» a los pacientes a todas las comidas, es conveniente tener prevista la conducta a adoptar antes de encaminarnos hacia una situación donde la comida no será la habitual, y por cierto ocupará el centro de la atención de los concurrentes. ¿Qué hacer?

Veamos algunas opciones, tómelas como sugerencias creativas, luego podrá inventarse otras más. La primera y más obvia es no ir (hay veces en que nuestra presencia pasaría desapercibida), otra es comer algo en casa antes de salir de manera que al llegar no se estará hambriento y podrá seleccionar sabiamente lo que conviene ingerir. Si sabe de antemano cual será el menú, ya puede ir con la decisión tomada respecto de lo que comerá y lo que no; y de la cantidad que se auto-permitirá. Busque sus nuevas opciones y le aconsejo que no claudique ante ninguna circunstancia. Llevar adelante estas estrategias permite desarrollar una habilidad que lo beneficiará notablemente.

Cuanto Hidrato de Carbono (HC) debe comer

Serán el médico y/o la licenciada en nutrición quienes le indicarán la cantidad. Aquí solo expresaré conceptos generales y datos útiles para el manejo cotidiano. Y olvídese de esa vieja recomendación que invitaba a evitar las P.

Lo primero a considerar es que alrededor del 50 % de las calorías diarias deben corresponder a HC. Los clasificamos en simples (pocas unidades de glucosa, de absorción rápida) y complejos (muchísimas unidades de glucosa, formando conglomerados similares a ovillos). Como veremos a continuación la leche, el pan, una golosina, el arroz o el zapallo son fuentes de HC. Se distinguen en la concentración (la leche tiene menos que el arroz) y en la manera que se presentan, ya que un vaso de jugo de naranja, que contiene HC simples, liberará glucosa más rápidamente que una porción de fideos macarrones (HC complejos). La cantidad final de glucosa depende de la porción y la velocidad de absorción depende del tipo de alimento ingerido.

Hay novedades con las papas

Las papas aportan HC complejos en forma de almidón, lo que determina que la absorción de la papa tarde más tiempo y de esta manera, la glucemia suba más lentamente, comparado con un dulce .¿Cuál es el beneficio de un ascenso lento y gradual de la glucemia? Mayor saciedad y mejor adaptación del organismo para dar destino a la glucosa.

Lo mejor es cocinar la papa entera con cáscara, hasta que este cocida, luego dejar enfriar y posteriormente guardar la papa en la heladera, entera y sin cortar. En este proceso de hervido y enfriado, hace que el almidón se compacte en el interior de la papa y de esta manera será más difícil su digestión. Esto sucederá independientemente de cómo decida luego consumirla. Tanto fría en ensalada o bien re-calentada en microondas.

Tabla de contenido en gramos de Hidrato de Carbono de alimentos comunes. Cada 100 g del producto

Alimento

Carbohidratos

Azúcar

95

Arroz

86

Pasta seca

82

Harina de Trigo

80

Cereal de desayuno

80

Miel

78

Harina de maíz

76

Galletitas de agua

74

Puré Cheff

73

Pasas de uva

71

Mermeladas

70

Papas fritas

69

Chocolate con leche

58

Pan blanco

58

Garbanzos – Lentejas

55

Papa

21

Banana

20

Uvas

16

Yogur entero

15

Hortalizas: Clasificación según el contenido de Hidratos de Carbono.

Grupo A (hasta un 5% de hidratos de carbono) : acelga, apio, espinaca, berenjena, coliflor, lechuga, pimiento, rabanito, repollo, tomate, zapallito. Grupo B (hasta el 10% de hidratos de carbono):alcaucil (alcachofa), arveja fresca, cebolla, chaucha, nabo, puerro, zapallo, zanahoria, remolacha (betarraga) Grupo C (hasta el 20% de hidratos de carbono): batata, mandioca, papa, choclo (maíz).

Tenga en cuenta que la combinación de pastas o arroz con hortalizas tiene efectos beneficiosos ya que la fibra vegetal ralentiza la absorción de los hidratos de carbono.

Las frutas en promedio tienen más azúcar que las hortalizas, pero ese no es argumento para rechazarlas, por el contrario, aportan minerales y vitaminas y son dulces naturales, solo deben ser consumidas con prudencia

Por ejemplo, las porciones de fruta que contienen 15 gramos de carbohidratos, porción adecuada para un postre de alguien que tiene diabetes:

  • 1⁄2 banana.
  • 1⁄2 taza de durazno picado
  • 1 1⁄4 taza de sandía
  • 1 1⁄4 taza de frutillasEs resumen, usted puede y debe consumir carbohidratos, tanto si los mismos provienen de una manzana, pan o un plato de espaguetis (desde luego que siempre los

carbohidratos complejos son preferibles). Obviamente el tamaño de la porción terminará siendo lo más importante.

Alejandro Ugarte, MN 63.208
Médico Nutricionista (UBA)
Jefe de la Sección Nutrición y Diabetes del CEMIC
Profesor Asociado de Medicina del Instituto Universitario CEMIC. Escuela de Medicina

¿Tenés diabetes?

Una persona con diagnóstico de diabetes, es más que sus niveles de glucosa en la sangre. Tiene sentimientos y una historia personal. La manera en que respondas a los desafíos que te impone la diabetes puede determinar: si será una contrariedad moderada o una enfermedad importante.
No vivís solo/a, la diabetes no solamente te afecta a vos. Tu familia, amigos y compañeros de trabajo también se ven de algún modo afectados. Preocupados, hasta temerosos, e intentarán ayudar.

¿Sabías que también tienen o tuvieron diabetes?:
El Inventor Thomas Alva Edison
Ray Kroc, que fundó la cadena McDonald’s.
Actores de cine como Sharon Stone, Spencer Tracy, Woody Allen, Halle Berry, Jerry Lewis, Mary Tyler Moore, Ton Hanks o Elizabeth Taylor.
Pintores como Paul Cézanne.
Escritores como Ernest Hemingway, Mario Puzo, autor de El Padrino o H. G. Wells, el de la Guerra de los Mundos. George Lucas (Star Wars)
Músicos como Ella Fitzgerald, Elvis Presley, Celia Cruz, Jerry Garcia, del grupo Grateful Dead; Johnny Cash; los trompetistas Dizzy Gillespie y Miles Davis, la cantante de gospel Mahalia Jackson, Aretha Franklin, el guitarrista B.B. King, James Brown, Nick Jonas de los Jonas Brothers. El magnífico e irrepetible Giacomo Puccini, también tenía diabetes.
Además de Nachi Heguy, polista argentino con 10 de handicap. El abogado y periodista Mariano Grondona. El Papa Juan Pablo II. Y un largo etc.
Definitivamente: Son Muchos!.

La diabetes no debería impedirte hacer lo que quieras con su vida (con pocas excepciones, por ejemplo ser piloto aerocomercial).
Es cierto que la diabetes requiere un cuidado, pero hay un potencial premio, al seguir las recomendaciones suele ocurrir que su salud, en términos generales, estarás algo “mejor” que la de otras personas que no padecen de diabetes pero fuman, comen exageradamente y/o son sedentarios.

Hay personas a las que padecer diabetes las obligó a ser más fuertes, más perseverantes y, por consiguiente, más exitosas.

Si las cosas no salen como lo esperás, nunca será un fracaso, contás con profesionales que te van a ayudar. Estés donde estés. Buscalos.

DoctorUgarte
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La Hemoglobina Glicosilada

¿Por qué a los médicos en general y a los diabetólogos en particular, les interesa más la Hemoglobina Glicosilada (Hb A1c) que la Glucemia en los controles realizados a pacientes con Diabetes Mellitus (DM)?

Resulta que la Hemoglobina Glicosilada, conocida familiarmente como la «A1c», es una proteína que como cualquier otra, en contacto con glucosa, se va impregnando de esta, y al ser medida refleja la elevación de la glucosa, en un periodo retrospectivo de 3 a 4 meses (la hemoglobina se renueva aproximadamente cada 90 días, o un poco más), El valor obtenido se expresa como porcentaje (%).

Es  muy tenida en cuenta una metodología para el seguimiento y control de la diabetes en el mediano plazo. Logró Introducir el concepto de “promedio” o acumulación de glucosa en el organismo. La A1c, es hoy una determinación muy importante, y tiene una historia:

  • Identificada por primera vez en 1958.
  • Su incremento fue relacionado a la Diabetes por primera vez en 1969.
  • Las reacciones bioquímicas que llevan a su formación se describieron en 1975.
  • El uso de la A1c para el monitoreo del control del metabolismo de la glucosa en

pacientes diabéticos, se propuso en 1976.

  • Fueron los estudios: Diabetes Control and Complications Trial (DCCT), publicado en 1993 y El Estudio Prospectivo de Diabetes del Reino Unido (UKPDS) en 1998, los que mostraron la real importancia de su uso en el seguimiento y control de la DM tipo 1 y 2.
  • En 2012 se la comienza a utilizar como método diagnóstico de Diabetes y no solo de control

Su prestigio radica en que

– La A1c ha sido estandarizada internacionalmente

– Es el mejor indicador de exposición a altos niveles de glucemia, y también un buen índice del riesgo de padecer complicaciones a largo plazo.

– La toma de muestra no guarda relación con el ayuno, ni el estado de ánimo del individuo. Sus resultados no están inmediatamente influidos por los procesos agudos (fiebre por ejemplo), que habitualmente alteran las cifras de glucemia.

– La DM puede ser diagnosticada cuando los niveles de HbA1c sean iguales o mayores a 6,5 %. El diagnóstico debe ser confirmado con una segunda determinación de A1c, aunque no sería necesaria si el paciente presenta síntomas y una glucemia de 200 mg/dL o más.

– En pacientes con anemia se recomienda para el diagnóstico de DM el uso de los métodos tradicionales (glucemia en ayunas, al azar o Prueba de Tolerancia a la Glucosa).

– La utiliza el médico como guía para realizar modificaciones terapéuticas.

Cuadro 1. Correlación aproximada de A1C y niveles de glucosa

HbA1c% mg/dL
6 135
7 170
8 205
9 240
10 275
11 310
12 345

Teniendo en cuenta esto, podemos resumir que la HbA1c, es un examen de gran valor en el control glucémico de los últimos 3 a 4 meses en personas con DM, y aunque no es igual, sus niveles son equivalentes a los de glucemias realizadas en sangre, ofreciendo numerosas ventajas sobre estas últimas. Además, constituye una herramienta más a tener en cuenta dentro de las pruebas que se utilizan para realizar el diagnóstico de personas con DM y a identificar individuos con alto riesgo de padecer la enfermedad.

Fuente: American Diabetes Association. Standards of medical care in diabetes 2016. Diabetes Care. Suppl 1

Dr. Alejandro Ugarte

Médico Nutricionista

Profesor Asociado de Medicina y Titular de Dietoterapia del Adulto en larrera de Nutricion.  IUC (Instituto Universitario CEMIC)

Jefe de la Sección Nutrición y Diabetes del CEMIC